Infecciosa afección corpórea
de enfermedad en rebeldía,
de instalación no grata
emboscada en cobardía.

 

Tos oscura y misteriosa
que nace de mi cuerpo postrado.
Muerte interna... silenciosa
de mi pecho que está hinchado.

 

Lucha feroz, tormentosa
entre agentes nocivos y guardianes.
Escenario de muerte espantosa,
muertos los benignos y rufianes.

 

Al fin mi cuerpo cansado
resiste el ataque airoso.

Lo más terrible ha pasado,
por fin descanso en el foso.

 

 

 

Juan Jara